Desde sus orígenes griegos, el término CATARSIS se
asocia con ¨purificación”. En Medicina, por ejemplo, la expresión fue utilizada
inicialmente con la connotación de “purga”, aludiendo a la limpieza física
interna de cuerpo.
Posteriormente, fue utilizada por Aristóteles para aludir a
la purificación moral y espiritual. En este sentido, se le atribuía a las obras
de la tragedia griega un efecto catártico, pues en la medida en que los espectadores
“veían reflejados” en los actores sus propios tormentos, debilidades de espíritu
y culpas, experimentaban en sí mimos “la justicia” del castigo que correspondía
en la trama, sintiendo la “liberación de sus almas”.
En el Psicoanálisis, el proceso catártico de “liberación
emocional” se refiere a la “purga” de conflictos inconscientes, a través de un conjunto de
técnicas desarrolladas originalmente por Breuer, y posteriormente
adaptadas por Freud como aspectos importantes de su teoría y psicoterapia
psicoanalítica.